Cuenta la leyenda que en tierras mucho más al este de la India existió un sultán que codiciaba el marfil. Mandó construir una torre que sería hecha
exclusivamente de éste material. Al mando de los arquitectos estaría el visir, su mano derecha. Al poco tiempo el visir se dio cuenta que no había marfil suficiente como para construir la torre, así que decidió emplear huesos de animales suficientemente retocados. Pero el sultán conoció la verdad de la boca de un esclavo y mandó apresar al visir. Éste tuvo el tiempo justo para huir y encerrarse en la torre. Pero ésta fue asediada y asaltada por las tropas del sultán. Sin embargo nadie que entró en la torre salió con vida. El cuerpo del visir tampoco se encontró...
exclusivamente de éste material. Al mando de los arquitectos estaría el visir, su mano derecha. Al poco tiempo el visir se dio cuenta que no había marfil suficiente como para construir la torre, así que decidió emplear huesos de animales suficientemente retocados. Pero el sultán conoció la verdad de la boca de un esclavo y mandó apresar al visir. Éste tuvo el tiempo justo para huir y encerrarse en la torre. Pero ésta fue asediada y asaltada por las tropas del sultán. Sin embargo nadie que entró en la torre salió con vida. El cuerpo del visir tampoco se encontró...
La Torre quedó maldita y así pasaron los años...
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